El imaginario fotográfico de Michel Frizot |
¿Qué distingue a la fotografía de otras disciplinas o artes? ¿Cómo fue bautizada esta práctica? ¿Cuáles han sido las comparaciones desafortunadas entre el ojo humano y la cámara obscura? ¿Cuáles fueron las imprecisiones que cometió Walter Benjamín al escribir sobre el medio, pocas veces señaladas y aquí refutadas? Frizot da una respuesta a éstas y a otras preguntas. De acuerdo con el autor, la fotografía se encuentra en el umbral de lo invisible: “siempre debemos sospechar que la fotografía nos remite a ‘otra cosa’ distinta de lo que llamamos ‘realidad’. Y esta ‘otra cosa’ se compone en primer lugar de la toma realizada con ayuda del dispositivo (…)”, lo cual constituye el tema de este libro; pero la fotografía también se compone “de las intervenciones del fotógrafo-operador para luego recomponerse en la mente de de cada observador de fotografías (…)” La invención de la fotografía trajo consigo la formación de un imaginario específico construido, según Frizot, “a través de la historia de la fotografía y de una variedad de prácticas, por la integración mental de nuevas formas de representación que, partiendo de una determinada técnica, favorecen una relación individual con el mundo”. Para Frizot, estudiar la producción de una foto es indispensable para descifrarla: la fotografía es una imagen técnica a la vez sofisticada y defectuosa, que debemos diferenciar de otro tipo de imágenes, ya que ésta es resultado de la acción de la luz sobre una superficie sensible, de un proceso de producción que involucra un dispositivo óptico, de motivaciones y circunstancias específicas, así como de la percepción de un espectador que proyecta en ella sus recuerdos, afectos y experiencias.
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